Sverre Magnus: un príncipe noruego en busca de su propio camino

A dos décadas de su nacimiento, el príncipe noruego inicia una etapa de cambios: estudios, mudanza y nuevos proyectos fuera del foco público.

Realeza03 de diciembre de 2025Marcela NazarMarcela Nazar
Sverre Magnus
Sverre Magnus: un príncipe noruego en busca de su propio camino

A veces, cumplir años en una familia real significa mucho más que soplar velas. En el caso de Sverre Magnus, el hijo menor del príncipe Haakon de Noruega y la princesa Mette-Marit, este 3 de diciembre no solo representa la llegada a los 20 años, sino un punto en el que la vida íntima se cruza inevitablemente con el escrutinio público. En medio de un año turbulento para la monarquía noruega y después de decisiones que lo llevaron lejos de casa, el joven príncipe comienza una etapa que evidencia su deseo de construir una identidad propia, incluso cuando el mundo insiste en mirarlo a través del lente de su apellido.

Un joven que creció entre tradición y normalidad

Desde su nacimiento en 2005, Sverre Magnus ha transitado un camino distinto al de otros jóvenes royals europeos. Sus padres insistieron en que él y su hermana mayor, la princesa Ingrid Alexandra, vivieran una infancia lo más parecida posible a la del resto de los niños noruegos. Esa elección se reflejó en escuelas públicas, trayectos en bicicleta, amigos fuera del círculo aristocrático y una libertad que, para muchos, parecía impensable dentro de un palacio.

Con el tiempo fue descubriendo intereses que no necesariamente coincidían con los que la corona esperaba. Su paso por el liceo Elvebakken (con fuerte énfasis en tecnología y producción mediática) fue una pista de lo que vendría después: un interés genuino por la narrativa visual, la fotografía y la creación de contenidos.

En junio de 2024 cerró su etapa escolar con un diploma que no solo hablaba de estudios terminados, sino de un ciclo de vida que se abría hacia algo más personal y menos marcado por el protocolo.

Sverre Magnus e Ingrid de Noruega

Italia: un refugio creativo y una declaración de independencia

La decisión de mudarse a Italia en 2024 sorprendió a más de uno dentro y fuera de Noruega. No hubo discursos grandilocuentes ni comunicados elaborados: simplemente un joven que eligió un país donde podía estudiar cine y fotografía sin sentir el peso diario de representar a una institución.

En este tiempo ha construido una vida más silenciosa, más suya. Fundó su propia productora, un proyecto pequeño pero significativo que le permite explorar encuadres, historias y experimentos visuales lejos de los flashes que acompañan a la realeza. Es, quizá, la primera vez que se le ve ocupar un espacio donde no está obligado a ser “el príncipe”, sino un chico curioso, creativo y (como él mismo ha dicho en entrevistas) alguien que todavía está aprendiendo a entender su lugar en el mundo.

Mette Marit y su hijo menor Sverre Magnus

La familia, el sostén y la brújula

Si algo ha dejado claro Sverre Magnus es que la distancia física no ha roto el lazo con su familia. Muy especialmente con la princesa Ingrid Alexandra, heredera al trono y una de las figuras más queridas de la monarquía. La relación entre ambos siempre ha sido cercana, marcada por complicidad genuina, humor compartido y un respeto que se nota incluso en los momentos más formales.

Ella asume el peso del futuro de la corona; él, el de encontrar un rol que tenga sentido para sí mismo. En esa diferencia se ha construido un equilibrio que, según allegados a la familia, ha sido clave para sobrellevar los desafíos internos que la institución ha enfrentado en los últimos meses.

El cumpleaños número 20 llega, además, poco después de que se confirmara su ruptura con Amalie Giæver Macleod, su pareja desde hace años. La noticia coincidió con días complejos para la casa real, lo que dio a su historia personal un matiz inevitablemente más público. Aun así, quienes lo conocen señalan que está concentrado en sus estudios y en mantener un círculo cercano que le permita vivir esta transición sin perder la perspectiva.

Sverre Magnus y Amalie Giæver Macleod

Un príncipe del siglo XXI

La vida de Sverre Magnus no está definida por una obligación sucesoria (ocupa el tercer lugar en la línea al trono), pero sí por una nueva forma de ser royal en tiempos donde las coronas ya no se sostienen solo con tradición. Su apuesta por una vida más libre y creativa habla de una generación que entiende que el deber también puede construirse desde la autenticidad.

Ingrid de NoruegaLa princesa Ingrid resurge en medio del escándalo familiar

Hoy, al cumplir 20 años, no hay discursos oficiales ni grandes ceremonias. Lo que hay es un joven que aprende a ser adulto, que mira hacia adelante con una mezcla de cautela y entusiasmo, y que poco a poco se convierte en una figura distinta dentro de la monarquía noruega: alguien que no busca protagonismo, pero que tampoco está dispuesto a renunciar a sí mismo.

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