El cuento de la criada: la distopía que sigue estremeciendo al mundo

Margaret Atwood desafía al poder patriarcal con esta novela icónica, reflejo de las amenazas que aún acechan la libertad de las mujeres.

Books & Arts21 de julio de 2025 Mariela Castro
Margaret Atwood
El cuento de la criada: la distopía que sigue estremeciendo al mundo

¿Y si un día despertarás en un país donde ya no eres dueña de tu cuerpo, de tus decisiones ni de tu destino?
Esa es la premisa escalofriante de El cuento de la criada (The Handmaid’s Tale), de Margaret Atwood, una novela que —aunque fue escrita en 1985— hoy sigue siendo más actual que nunca.

Ganadora del Premio Arthur C. Clarke y adaptada a una exitosa serie televisiva, esta obra no solo se ha convertido en un símbolo feminista y literario, sino también en una advertencia sobre los peligros de los fundamentalismos, la represión institucional y la fragilidad de los derechos conquistados por las mujeres. En un mundo como el de Gilead, el control del cuerpo femenino ya no es simbólico: es absoluto, legal y brutal.

Margaret Atwood: la autora que ve el futuro

Margaret Atwood (Canadá, 1939) no es solo una escritora prolífica, es una visionaria. Con más de 50 libros publicados —entre poesía, ensayo y narrativa— su obra gira en torno a temas como el poder, la libertad, la ecología y el feminismo.

Además de El cuento de la criada, Atwood ha escrito títulos como Alias Grace, Oryx y Crake, El asesino ciego (Premio Booker) y Los testamentos, la esperada secuela que retoma la historia de Gilead 15 años después.

Ha sido reconocida por su compromiso con los derechos humanos, el medio ambiente y su férrea defensa del pensamiento crítico.

“No se escribe ciencia ficción, se escribe sobre lo que ya está pasando. Solo que llevado al extremo”, ha declarado.

HISTORIAS Y PORTADAS

Gilead: una pesadilla que huele demasiado a realidad

La historia se sitúa en una teocracia totalitaria llamada Gilead, surgida tras un colapso ambiental y una caída demográfica. En este régimen, las mujeres fértiles —denominadas criadas— son forzadas a reproducirse para la élite gobernante. Offred, la protagonista, es una de ellas. Su nombre, literalmente, significa “de Fred”, como si su identidad hubiera sido borrada por completo.

Todo está diseñado para controlar a la mujer: desde su vestimenta (capas rojas y cofias blancas) hasta su lenguaje. Las mujeres ya no pueden leer ni escribir. No pueden decidir. Y lo peor: muchas lo aceptan, muchas colaboran.
Es ahí donde Atwood nos lanza la pregunta más incómoda: ¿qué tan cerca estamos de ese futuro?

libro cuento la criada

Frases que sacuden, palabras que despiertan

"Nos acostumbramos a lo insoportable. Lo soportamos... hasta que dejamos de darnos cuenta de que lo estamos soportando."

"Ignoramos lo que estábamos perdiendo. No sabíamos que eso era el principio."

"Me repito que no es una historia, porque contar una historia es como darla por terminada."

Las palabras de Atwood atraviesan generaciones, y son también un eco del presente. En países donde los derechos sexuales y reproductivos están en constante amenaza, este libro ha sido usado como símbolo de protesta. Las capas rojas y cofias blancas han desfilado en silencio frente a parlamentos y tribunales, exigiendo justicia.

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Una lectura necesaria (y urgente)

El cuento de la criada no es una historia de ciencia ficción. Es un espejo incómodo de lo que puede pasar cuando dejamos de cuestionar al poder, cuando se naturaliza la violencia o cuando se silencia la voz de las mujeres.

No es casual que esta novela se haya convertido en un ícono contemporáneo. Nos obliga a mirar el presente con otros ojos, a defender las libertades que creíamos seguras, y a no olvidar que la historia puede repetirse… si no la leemos a tiempo.

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